Sinopsis:El mundo tenía dientes y podía morderte en cualquier momento. Trisha McFarland lo descubrió cuando tenía nueve años. A las diez de una mañana de principios de junio estaba sentada en el asiento trasero del Dodge Caravan de su madre, vestida con una sudadera azul de los Red Sox (la que llevaba 36 Gordon estampado en la espalda), y jugaba con su muñeca.
A las diez y media se había perdido en el bosque. A las once intentaba contener su terror, no pensar: Esto va en serio, esto va muy en serio. Intentaba no pensar que, en ocasiones, cuando la gente se perdía en el bosque salía gravemente dañada. A veces incluso moría.
En este Año Personal de Stephen King (ya leí 7 libros de él cuando hasta enero de este año no había leído ni uno de sus libros) les traigo la reseña de otra historia de este escritor!
Aunque el argumento es bien sencillo, es una historia muy interesante que muestra a Trisha McFarland una niña de 9 años, con sus padres divorciados y su hermano mayor molestoso que siempre para peleándose con su mamá. A Trisha le encanta el baseball, especialmente el jugador de los Red Soxs, Tom Gordon, quien es su ídolo.
Un fin de semana su mamá organiza una excursión por los bosques de los Apalaches. Como su mamá y su hermano están tan metidos en su discusión, ella se aleja para orinar y queriendo tomar un “atajo” se pierde en el bosque. Y ahí empieza su aventura: esta totalmente perdida, tiene muy poca comida y agua, los mosquitos la comen viva, se cae, se golpea, le da diarrea, y hay una Cosa que la sigue y la vigila, el Dios de los Perdidos, que no va a dejar que salga con vida del bosque. Es en ocasiones como esta que te dices que sí es muy necesario tener un celular! :P
Lloraba a raudales, más fuerte que cuando había comprendido que estaba perdida, pero esta vez eran lágrimas de alivio. Estaba perdida, pero pronto la iban a encontrar. Esta segura. Como Tom Gordon los había salvado, ella también seria salvada.
Lo que le alegra el día a la pequeña Trisha es escuchar los partidos de baseball en su walkman y conversar con Tom Gordon (en alucinaciones). Y así sigue su caminata por el bosque tratando de salir de ahí y poco a poco perdiendo la esperanza que la encuentren.
¿Porque intentar negarlo? A cada hora que pasaba, parecía más evidente. Ella iba a morir. No importa cuantos kilómetros caminase, cuantos pescados crudos se obligara a comer.
El personaje de Trisha te engancha rápidamente, es inteligente (aunque para apartarse del sendero hay que ser bien inteligente!), es práctica y actúa muy bien para la situación en la que está metida. Además cambia de los personajes de Stephen King que he estado leyendo últimamente!
Mientras lees La chica que amaba a Tom Gordon te la pasa preguntando si la Cosa la matará, si morirá de hambre, si la encontrará el equipo de rescate, o si por algún milagro se salva. Y a mi personalmente me gustó mucho el final que tiene!
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